37. Los DS de Henri Chapron

Logotipo de la carrocera Chapron 1919-1985
Henri Chapron fue el único carrocero de la época gloriosa de los carroceros galos que supo compaginar lo artesanal y lo industrial. Este carrocero, con sede desde 1927 en los números 114 y 116 de la calle Aristide Briand de Llevarois-Perret, era prácticamente el único superviviente de la prestigiosa escuela carrocera del país vecino y acababa de construir, a partir de un Tracción seis cilindros y suspensión hidroneumática, un automóvil descapotable para las ceremonias oficiales del presidente de la República Francesa.
Henri Chapron había nacido en 1886 en un pueblo situado cerca de Orleáns, y aprendió el oficio en diversos talleres parisinos antes de establecerse por cuenta propia en Neuilly en 1919. La Primera Guerra Mundial ya había acabado, y Chapron adquirió excedentes de vehículos militares, entre ellos numerosos Ford T, para transformarlos en atractivos turismos. Las tres décadas siguientes constituyeron, con el paréntesis de la Segunda Guerra Mundial, el periodo de mayor gloria de los carroceros franceses en general y, en el caso concreto de Henri Chapron, la elaboración de elegantes aunque sobrias carrocerías a dos tonos sobre chasis de las marcas Delage, Hispano-Suiza, Talbot o Delahaye; y en los que se observan rasgos tan característicos de Chapron como el tono contrastado de la línea de cintura y de los guardabarros para aligerar las formas del automóvil.
A mediados de los años cincuenta, la desaparición de las marcas de lujo francesas había puesto en dificultades a los carroceros, ya que el proteccionismo hacía prácticamente inviable la importación de chasis foráneos. Por otro lado, casi todo el mundo tenía necesidades más elementales que la de encargar una carrocería exclusiva, lo que motivó una reconversión forzosa de las firmas carroceras de prestigio que no quisiesen desaparecer. Para finales de 1955 se producirá la suspensión de pagos de Carrosserie Saoutchik; mientras que Henri Chapron Carrossier recibía cada vez más encargos de los propios fabricantes de automóviles. El porqué de estas diferencias entre estos dos buenos artesanos radicaba en que el segundo de ellos transformó su taller en una industria auxiliar que, además de elaborar proyectos para las marcas coches, seguía diseñando y construyendo pequeñas series basadas en modelos de gran producción.
Ejemplo de esta mueva manera de trabajar es precisamente el que Henri Chapron interviniese en la realización de varias piezas de chapa para los prototipos de Citroën DS, y que entre 1958 y 1974 el estilista galo fabricase casi trescientas unidades exclusivas elaboradas a partir del revolucionario automóvil de suspensión hidroneumática. Cuatro modelos diferentes de carrocería (Le Dandy, Le París, Concorde, Le Léman), tres Cábriolets (La Croisette, Le Caddy y Palm Beach), y las berlinas de lujo Majesty y Lorraine expresan en su variedad una forma muy personal de diseñar cuyo mayor mérito es embellecer aún más las inequívocas líneas del DS.

Paris Coach

Le Dandy Coupé

Le Léman Coach

Majesty Limousine

Lorraine Limousine

Palm Beach Cabriolet

Caddy Cabriolet

Croisette descapotable
Para que el trabajo exquisito del artesano fuese compatible con los buenos resultados económicos, en los talleres de Levallois-Perret se elaboraba el Citroën DS Prestige y, a partir de 1961, El DS Cábriolet, un diseño del irrepetible Flaminio Bertoni, estilista en nómina de la marca del doble galón desde los tiempos del Citroën Tracción. Estos encargos contribuyeron a aumentar los profundos vínculos entre el fabricante de automóviles, la Administración francesa y el carrocero, lo que desembocó en 1964 en el proyecto de un nuevo coche presidencial, diseñado por el estilista Porrón y fabricado en los talleres de Henri Chapron, para ser puesto al servicio del general De Gaulle.


1964 – DS presidencial del general De Gaulle
DS Cabriolet Chapron – Croisette descapotable

El descapotable Palm Beach, del que sólo se construyeron ocho unidades entre 1968 y 1969 en su última versión, muestra una belleza de líneas no exenta de una estudiada sobriedad. Su interior, ennoblecido con la coquetería del cuero y la madera, está repleto de detalles exóticos. En una época en la que todos los coches parecen estar cortados por el mismo patrón, causa placer encontrarse con un automóvil de tanta personalidad.






DS 21 de 1969 descapotable Palm Beach
Con el modelo Lorraine, Chapron volvía a mostrar su buen oficio a la hora de elaborar automóviles de representación. El destacable confort de marcha del DS va asociado a una apropiada combinación de tonos, maderas nobles, tapicería de piel, y por supuesto equipo de aire acondicionado.






DS 21 Lorraine limousine de 1972 – inyección electrónica







Henri Chapron junto a un Caddy en el salón de París de 1960

Planos de un DS Croisette descapotable por Henri Chapron


DS Croisette de Henri Chapron